martes, 27 de julio de 2010

Él paseó a su lado, ella dejaba que el viento jugara con su melena, sin preocuparse.
- Has roto con ella - Afirmó, no preguntó.
- Hace dos semanas - contestó él, sabiendo hacia donde se dirigía la conversación.
- Por eso estás aquí - De nuevo no era una pregunta.
- No, estoy aquí porque tú has terminado con él - terminado, no roto, buena matización, ya estaba roto hace tiempo.
Ella guardó silencio.
- Habría vuelto antes, tú lo sabes.
- Ha sido difícil - reconoció ella.
- Porque has cambiado - insistió de nuevo.
- Quizá - ella siempre tan parca en palabras.
De nuevo el silencio.
- ¿Por qué no cambiaste por mí? - sonaba dolido.
- Lo hice...
- No lo suficiente.
- No lo suficiente - Corroboró ella con un suspiro.
- ¿Y ahora?
- ¿Ahora qué? - Preguntó confusa.
- ¿Cambiarías por mí?
Ella le miró, manteniendo la mirada con sus ojos tristes.
- Ahora no sé ni pensar en mí...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

sonrisas al aire