sábado, 26 de mayo de 2012

Tóxico. Esa es la palabra que mejor te define. En cuanto entro en contacto contigo empiezas a envenenarme, cuanto más me acerco más enferma estoy. Y da igual cuánto me aleje de tu zona de expansión, porque te mueves en el aire hasta encontrarme. Me falta el aire y mi cabeza se vuelve loca, dejo de pensar con claridad. Lo peor de tu toxina es que crea adicción, y en cuanto me faltas me entra el mono. En los pocos momentos en los que respiro aire puro consigo controlarme lo suficiente para mantenerme alejada, pero si me infectas de nuevo no puedo prometer nada.
Me subes la fiebre.

Has invadido mi zona de cuarentena
y has conseguido desequilibrarme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

sonrisas al aire