De nuevo se han vuelto a mezclar el alcohol y las mariposas, y ha sido gracias a ti, que siempre apareces con tu brillante armadura para salvar la noche. Igual me das una de cal y otra de arena, pero siempre me sacas esa última sonrisa que lo arregla todo. Alarguemos el tiempo y acortemos la distancia, y puede que de todo esto salga algo bueno.
Tienes razón,
así deberían ser todas las noches.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
sonrisas al aire