Es demasiado cansado seguir dando vueltas en círculo, pero haga lo que haga siempre vuelvo aquí. No importa el empeño que ponga en buscar diferentes caminos, siempre acabo en Roma. A veces Roma es esa ciudad en la que desearía perderme, y otras, sólo quiero escapar. Porque hace frío aquí, por muchas mantas que me tiendas, y aparece demasiada gente interfiriendo en mi historia. Levanto orgullosa la mirada, pero el viento me hace cerrar los ojos. Nunca supe dejarme llevar y no soy capaz de empezar ahora. Quisiera conformarme, pero Roma no es lo suficientemente grande.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
sonrisas al aire