Necesitaba esto. Necesitaba conocer a alguien, pasar horas hablando, entre sonrisas y besos. Sin pensar. Sin imaginar un mañana, sin interpretar el ayer. Simple. Ver el amanecer y despedirse, quién sabe hasta cuándo. Sin nada que estropee ese recuerdo. Quizá nunca nos volvamos a ver, o puede que el destino se esfuerce por nosotros, pero si no es así, habrá sido una noche magnífica, entre tú y yo, alcohol y mariposas.
Un soplo de aire fresco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
sonrisas al aire